Durante las semanas previas al fin de año, los japoneses hacen una profunda limpieza en sus hogares; es lo que se conoce como OSOJI (大掃除) o “gran limpieza”.
El osoji tiene un componente espiritual y metafórico: al limpiar la casa físicamente es como si se limpiase también el alma y la vida de sus habitantes y se puede comenzar así el año nuevo desde cero, purificados, limpios física y espiritualmente.
La limpieza del osoji cubre especialmente rincones y áreas que se pasaron por alto durante la limpieza cotidiana. También incluye pagar deudas o facturas, así como todo aquello que quedó pendiente antes de terminar el año.
Esta limpieza no se realiza sólo en casas, sino también en oficinas, escuelas, en tiendas y locales.
Fuente: japonismo.com